¿Lo puede todo el amor? ¿Qué sientes cuando te enamoras? Si eres correspondida... ¿lo intentarías? ¿Y si es el chulito de clase? ¿Vas a creerlo? A todas estas preguntas deben responder nuestros protagonistas. Ashley, Lucy, Sarah, Alice, James, Danni, Eric y Drake, os harán soñar... ¿Perseguirán sus sueños o se conformarán con lo que ya tienen?
Eric Johnson.
James Andrush.
Danni Blammer.
Lucy Adams.
Ashley Andrush-Allí están los autobuses –informa Robert Harrington.
En efecto. Unos veinte autobuses aparcan en la puerta del castillo. Los alumnos se bajan revolucionados. Hay mucho que contar. Y allí está ella. Tan hermosa como la recordaba. O al menos eso piensa él. Está con sus amigas. Es una chica muy dulce. Después de este tiempo, le sigue pareciendo un ángel.
-Será mejor que entremos –dice el director a su antiguo alumno.
-Sí… -dice despistado.
-Venga ya, decidme que no lo habéis echado de menos –reprocha Alice a sus amigas. Éstas gruñen como respuesta.
-Buenos días pelirroja –dice una voz detrás de ellas. James, Danni y Eric están justo detrás. El que ha hablado es James.
-Hola –dice secamente.
-Uy, uy, uy, cómo empezamos el curso ¿eh? –ríe divertido - ¿Sabes qué? Este año es mi año. Vas a tener el honor de salir conmigo.
-Ya… ¿puedo ceder este gran honor a otra? Es que no me interesa –todos los años igual. Lucy ha tenido que ser de las pocas chicas con las que él no se ha liado. Y no por falta de ganas. La chica no quiere ser como esas otras chicas que van llorando por los rincones porque él las ha dejado. No, mejor seguir siendo lo que son. Compañeros de clase y, para su disgusto, de torre.
-Yo no estaría tan seguro de eso –Antes de que ella pueda reaccionar le planta un beso en los labios y se marcha sonriente.
-¿¡Pero tú qué te crees?!
Danni y Eric van detrás de él. El primero se despide antes de su amiga con un beso en la cabeza como gesto cariñoso de hermanos, que es lo que siente él por ella. Ashley suspira resignada. Hace tiempo que sabe que nunca pasará nada entre ellos.
Y así, empieza el año. Entran todos al vestíbulo. Allí están el director y su nuevo ayudante… ¡un momento! ¿Ese no es…?
El corazón de Alice comienza a palpitar fuertemente. Parece que se le va a salir por la boca. No puede ser… ¡Es él! ¡Está aquí!
-¿Has visto que…? –empieza Sarah. Alice la interrumpe asintiendo con la cabeza.
-Un año más me alegro de veros a todos –comienza el director Harrington- Y bienvenidos a los más pequeños. No habríais encontrado otro colegio mejor que este. Somos una gran familia. Seguramente tendréis hambre, así que comeremos y luego podréis disfrutar de lo que queda de día, ¿os parece? Pero antes de irnos sólo quiero deciros un par de cosas. Primero, espero que os unáis a mí al dar la bienvenida de nuevo a Drake Smith. Este año será mi ayudante y os dará algunas clases. Si tenemos suerte, el año que viene se quedará definitivamente. ¡Un fuerte aplauso!
El chico sonríe. La busca entre los alumnos. Ahí está. Sus ojos se clavan en los suyos. Parece feliz. Se abraza a una de sus amigas. Suspira. Van a tener mucho tiempo para estar juntos este año.
-Y para terminar…me gustaría dirigirme a los alumnos de último curso. Este año habrá que esforzarse mucho. Es vuestro último año y necesitáis estar a tope –los alumnos ríen por la manera que tiene su director de ser moderno –Ahora sí, ¡vamos a comer!
-No puedo creerme que ya haya acabado el curso –se queja una chica morena –Se ha pasado en nada.
-Yo tenía ganas de volver –la chica de delante se vuelve en el asiento para mirarla a la cara –Os echaba de menos.
-Eres un sol Alice, pero no vas a comparar la playa y la piscina con ese castillo lúgubre –replica.
-Deja de quejarte Ashley, todos los años dices lo mismo – se ríe la chica que se sienta a su lado. Son idénticas. Pelo, ojos y alturas distintas, pero tienen la misma cara y cuerpo. Ashley le saca la lengua.
-Creo que estamos llegando ya –dice la chica de al lado de Alice. Lucy. Pelirroja, de ojos verdes, no muy alta y buen cuerpo.
-¡Ahí está gente! ¡Nuestro castillo! ¡Hemos llegado! –grita un chico rubio desde el final del autobús. Los dos chicos que están sentados a su lado se unen a sus gritos.
-¡Con lo tranquilas que íbamos! –refunfuña Lucy.
-Esos tres siempre la están liando –dice Alice –No sé cómo los aguantáis chicas.
-¿Qué quieres? Somos familia –contesta Ashley- Ni que pudiésemos elegir a nuestro primo.
Sarah y Ashley son hermanas. James es su primo, pero prácticamente se han criado juntos, así que, entre ellos, son como hermanos y se tratan como tal.
-Además, él es genial, son Danni y Eric los que lo lían –dice Sarah.
-Me creo lo de Danni, que es tan chulo e insoportable como él, pero lo de Eric no se lo cree nadie… En todo caso son Danni y James los que lo llevan por el mal camino, él es muy dulce –dice Lucy.
-¿Te gusta Eric? –pregunta asombrada Sarah.
-¡Que va! ¡Jamás te lo levantaría! –se ríe.
-No estamos saliendo –dice enfadada.
-Pero te gustaría –dicen las tres chicas a la vez.
A Sarah le gusta Eric desde que eran pequeños, pero él nunca le ha prestado mayor atención que la de ser la prima de su mejor amigo. Lucy es su mejor amiga. Por eso la pelirroja siempre pica a su amiga.
-¡Y venís vosotras a hablar! Ashley está enamorada de su mejor amigo, casi hermano, desde que llegó al colegio, Lucy, niega y reniega pero estoy convencida de que si tanto te quejas de James es porque te gusta a muerte y Alice todas sabemos lo que te pasa a ti- finaliza la chica satisfecha. Y entonces llegan las protestas.
-¡A mí no me gusta tu primo!
-¿Yo enamorada de Danni? ¡No me hagas reír!
-¿Qué pasa conmigo? –pregunta Alice desconcertada.
-El chico que te gusta se fue hace dos años y desde entonces, no te has fijado en ninguno, ¿recuerdas? Eso que hemos estado hablando todo el verano –le recuerda.
-Se me había olvidado, pero gracias por recordármelo –dice Alice con retintín -¿Ash? ¿Qué te pasa?
La morena se ha vuelto en el asiento, mirando al final del autobús. Sus amigas se giran y miran hacia allí. Nada fuera de lo normal. Danni y James prácticamente se comen a dos rubias buenísimas, super populares y más tontas que una lagartija. Eric habla con una tercera rubia y, de vez en cuando, se besan con dulzura.
Una vez más, el curso empieza igual. Por suerte, ya se ve el castillo…
Noshville, el internado más famoso y de más prestigio de toda Inglaterra. Los chicos más destacados de todos los colegios, van a estudiar a Noshville. Los que pueden permitírselo, por supuesto. Aunque el colegio siempre oferta plazas para este tipo de alumnos. Becas Famous-students se llaman. Claro que no todo el mundo es admitido. Todos los años, en todos los colegios, los representantes de Noshville hacen un examen para escoger sólo a los mejores. No sólo se premia la inteligencia, lo cual es muy importante, también al tipo de persona. Valor, bondad, orgullo…son los rasgos que uno necesita para triunfar. Es cierto que no todos los alumnos de Noshville poseen estos rasgos. Algunos poseen más de unos que de otros. Pero eso no importa. Para eso están allí los mejores profesores del mundo. Para enseñar, no sólo las materias, sino también a crecer como personas. Los niños entran en el internado con 11 años y salen con 17. Justo para empezar con la universidad. Las universidades a las que van a acceder este tipo de alumnos, son de las más importantes. Todas exigen una prueba para entrar. No es un problema para Noshville. Hasta la fecha, ni uno solo de sus estudiantes se ha quedado fuera de la universidad a la que quería ir.
El internado es un castillo inmenso, de la época romana. Está decorado como tal, por supuesto. Los estudiantes viven allí. Sólo pueden salir en vacaciones. Noshville está situado entre un bosque y un gran lago. Su localización es complicada. Pero así es mejor. No hay nada que los distraiga.
Los dormitorios de los chicos están distribuidos por las torres del castillo. Y hay muchas. Los dormitorios van por edad. Los chicos de 11 años en una torre. La torre está dividida en dos, una parte para chicas y otra para chicos. Si hay muchos alumnos de la misma edad, utilizan las torres siguientes. Que estés en una torre u otra depende de que tu personalidad y la de tus compañeros sean afines, para que os llevéis bien y no hay problemas. Cada una tiene una sala para descansar y poder estar todos juntos. La pregunta que hacen los padres es, ¿por qué están ligados chicos y chicas? En Noshville piensan que en la vida tendrán que estar con personas de ambos sexos, así que es una tontería separarlos. Aun así prefieren que los dormitorios no estén unidos. Cuando subes a cualquiera de las torres está la salita. A la derecha hay una escalera que lleva a los dormitorios de los chicos y a la izquierda hay otra que va hacia los dormitorios de las chicas. Las habitaciones son de cuatro personas.
Todos comen juntos en un salón enorme. Las clases están separadas por apellidos. En Noshville no hay problemas. Los profesores son muy estrictos.
Hoy es día 1 de septiembre. El director, Robert Harrington, espera junto a su nuevo ayudante, Drake Smith, esperan en la entrada del castillo. Los autobuses con los alumnos están a punto de llegar.
-¿Nervioso Drake? –pregunta el señor Harrington.
-Un poco, señor. De nuevo le doy las gracias por permitirme que me quede aquí este año –dice el chico.
-No hay problema. ¿Dónde mejor para hacer tus prácticas que en tu antiguo colegio? –responde. Mira a su alumno. Lo recuerda. Hace apenas un año salió del colegio. Gracias a su enorme potencial, ha terminado tres años de carrera en uno solo. Este es su último año. La universidad le ha permitido estudiar y hacer prácticas a la vez. Y él ha elegido hacerlas en Noshville. Robert Harrington espera que, después de este año, pueda quedarse allí de forma permanente.
-Mire, señor. Ya llegan –dice Eric.
-Así es. Prepárate Eric. Esto no va a ser fácil. Ellos no son fáciles. Vas a tener que trabajar muy duro –le avisa.
-Seguro que puedo con ello –responde confiado.
El director sonríe. Eso es lo que le gusta de sus alumnos. La seguridad que ganan. Pero ya es hora de empezar. Sus alumnos están llegando. Un nuevo curso está a punto de empezar.
